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Por: Jairo Eduardo Soto Molina
“A los ricos de este siglo manda que no sean altivos, ni pongan la esperanza en las riquezas, las cuales son inciertas, sino en el Dios vivo, que nos da todas las cosas en abundancia para que las disfrutemos” (1 Timoteo 6:17)
Mientras se pretenda llegar a espacios de poder con las mismas armas de la política tradicional, estaremos condenados al fracaso. Mientras los candidatos se crean ‘Superman o la mujer maravilla’ quedaremos regados en la vera del camino. La elección del representante de los docentes deja una gran experiencia que es la maestra de todos los grandes maestros y maestras: primero te enseña y después te da la lección.
Felicito a los profesores Wendel Archibald y Martín Orozco ganaderos en esta democracia imperfecta, pero ganadores. Al menos ambos tienen donde gente y son lideres y hombres de academia, que ojalá nos sepan representar. Les deseo éxitos como cuando me acerque a ellos antes de la elección y les desee suerte. Pero veo el futuro muy incierto. El futuro institucional totalmente nublado como los medios días de septiembre y octubre.
El problema no es disfrazarse de progresista o colocarse una máscara como tal, ¡no señor! es pensar sentir y actuar como tal. Gracias a los 30 profesores que votaron por nosotros sin darles cuadernos lapiceros o agendas, medicinas o garantizarle puntos de una publicación. Porque nos han convertido nuestros derechos en “favores políticos”. El problema no es seguir contribuyendo al detrimento patrimonial de la institución impulsando falsos doctores que le hacen trampa a los regímenes salariales y se alían con las administraciones para ganar “derechos” que no les pertenecen.
Uno de los grandes problemas del ser humano es la actitud incorrecta que tiene frente a las riquezas y la dificultad para comprender que el verdadero tesoro, la riqueza que es integral, la que nunca se acaba, la que trae alegría y bendición, la que se puede disfrutar en acción de gracias y con sencillez de corazón, es la que da Dios y se refiere a un nuevo corazón sano y transformado por el Señor. Sólo un hombre o una mujer a quienes Dios ha dado sabiduría e integridad, pueden disfrutar la vida y todo aquello que Dios en su infinita misericordia le provea. Dios es el único que vive para siempre, las cosas materiales son temporales, son como la vida del hombre “que hoy es, y mañana dejará de ser”; si esto es la vida de un ser humano, ¿Qué serán las riquezas materiales de este mundo? Es para la reflexión este pasaje como verdaderos hijos de Dios.
Declararse progresista significa tener una matriz básica de coherencia frente a un tema: mi actitud en la vida no es acumular para mi sino distribuir para que lo que yo obtenga abra cupo para que siga creciendo lo que yo estoy acumulando; hay un concepto básico de la vida que es opuesto a las ideas progresistas. En el Pacto histórico está sucediendo un fenómeno muy crítico. Es que la gente que públicamente está teniendo un reconocimiento dentro del Pacto histórico por nexos de sangre, por nexos de amistad por nexos de tradición, por nexos de compañerismo…es una gente que es desnaturalizada de las necesidades reales del pueblo y que pretenden imponer unas prácticas que corresponden al modelo viejo o tradicional de hacer política. El cual no innova que no representa una vanguardia en el sentido de transformación de costumbres y conductas. Estamos frente a una situación crítica. Me ratifico y coincido con otro amigo en que el Pacto histórico hoy en día no tiene perfiles de candidatos opcionados ni para una alcaldía o para una gobernación. Exceptuando que traigan a Martha Villalba desde la política tradicional como aliada o que en un manto de protección especial negocien una candidatura de Armando Benedetti, compartiendo burocracia con otros sectores políticos de la ciudad. Para arrasar en un todo contra Char. Se ha luchado por formar un bloque de unidad donde hay 14 o 15 organizaciones en que hemos estado participando, pero hay una terrible resistencia en quienes tienen los espacios de poder en este gobierno.
Citas al cierre:
“Las naciones más progresistas son siempre las que navegan más y tienen más marinos”. — Ralph Waldo Emerson ensayista y poeta estadounidense 1803 – 1882
“La duda progresista (no retardataria) y bien manejada induce un sentido de modestia y es un buen remedio, si no el mejor, para la testarudez. No ser presuntuoso de las propias creencias, valores o ideología nos exime de la vanidad intelectual y el desgaste que implica querer siempre tener razón” — Walter Riso 1951
Tomémonos un tinto, seamos amigos.
Nota: El contenido de este artículo, es opinión y conceptos libres, espontáneos y de completa responsabilidad del Autor. Jairo Eduardo Soto Molina, Profesor de tiempo completo titular, investigador 1279 (80), Doctor en ciencias Humanas, Par académico MiniCiencias-MEN