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Por: Jairo Eduardo Soto Molina
“Un idioma diferente es una visión diferente de la vida”. Federico Fellini
Sencillo, tú no puedes dar de lo que no tienes o no comprendes. La mayoría de la dirigencia colombiana no habla el inglés como segunda lengua y aún hablándola no les habilita para entender que es un proceso de bilingüismo en el cual subyace un modelo. Fandiño, Y., Bermúdez, J., & Lugo, V. (2012). Porque, además, el pensamiento colonialista los lleva a pensar que a través de las empresas multinacionales de enseñanza de inglés es la forma más efectiva de realizarlo. Sin considerar siquiera el modelo intercultural bilingüe que hemos venido promoviendo para que el inglés tenga sentido y pertinencia para las clases populares. Esa interculturalidad crítica, la cual se inspira en el giro decolonial, (Mignolo, 1996, 2007), que pretende contribuir a la negociación de la diversidad sociocultural y a la conciliación de la diferencia entre lo local y lo extranjero, (Walsh, 2005).
Se le ha dado un manejo político cada uno a su manera desde las secretarias distritales, municipales y departamentales. Asimismo, no ha habido coherencia entre el discurso del MEN y las acciones realizadas por este ministerio y las mismas secretarias anteriormente mencionadas. El Plan Nacional de Bilingüismo se volvió una contratación más en el territorio nacional. Pero otra consideración final y no por ser la última, vendría a ser la menos importante, ¡por supuesto que no! Ha sido la poca o ninguna atención que las universidades le han dado al manejo de la segunda lengua por parte de los profesionales que han venido egresando. Los gobiernos anteriores y el actual han centrado el énfasis en los niveles de educación preescolar, básica y media para “desarrollar “el llamado plan de bilingüismo en Colombia”. Este plan ha tenido más limites que alcances. Heredia, K. & Soto, J. (2018).
Se puede observar que para los rectores y vicerrectores de las universidades no les significa nada que sus docentes deseen ser bilingües, no les dan ni el apoyo, ni las facilidades para que así lo sean. Conozco más de cinco casos por facultades en que a los docentes se les ha negado el apoyo para estudiar inglés. Pero ¿qué puede entender un directivo o decano que hable inglés que sus profesores lo hagan? Solo por dar un ejemplo, en las tres carreras de la Facultad de Ciencias Económicas donde el rector de la institución pertenece no hay ninguna revista latinoamericana en WOS. Las revistas internacionales serias están en inglés. Por la simple razón que la ciencia, la técnica y la tecnología están en inglés. El colmo fue que en el último concurso docente se excluyó el inglés. Por ello no se nombró a un doctor de la London School of Economics. La razón ¿? Averígüelo, Vargas. Por esta razón las publicaciones son unos refritos académicos porque no tienen valor ni teórico ni metodológico para ser publicadas por las revistas indexadas que cada vez son menos en nuestro medio. En nuestra universidad solo hay dos y una de ellas está casi condenada a desaparecer de la indexación al no presupuestar sus gastos. En una universidad como la Universidad del Atlántico, donde la oficina de informática ahora es llamada oficina de gestión digital. Como si el problema fuese cambiar de nombre donde la plataforma para clases digitales es más lo que no sirve que servir de apoyo a la labor docente, hasta el punto de que la plataforma SICVI-567 los estudiantes le llaman NO SIGVI; para indicar que no sirve.
Una universidad que no ha tenido en lo que va del año para pagar el dominio de uso a GMAIL y por esta razón los docentes no tienen capacidad de almacenamiento en sus correos institucionales y por consiguiente ya no se puede usar debidamente la plataforma de Google Classroom y los que hemos comprado el Microsoft 365 solo podemos utilizar con nuestras cuentas la plataforma TEAMS.
Lo anterior se sustenta en que el dominio del inglés va de la mano del uso de la tecnología. Bueno yo me voy saliendo de aquí despacito y espero en la próxima hablarle de temas más sociales o de las nuevas contrataciones del Júnior.
Cita al cierre: “El idioma es el mapa de carreteras de una cultura. Te dice de dónde viene su gente y hacia dónde va”: Rita Mae Brown
Tómenos un tinto, seamos amigos.
Sigan siendo felices, Jairo les dice.
Bibliografía:
Fandiño, Y., Bermúdez, J., & Lugo, V. (2012). Retos del Programa Nacional de Bilingüismo. Colombia Bilingüe. Educación y educadores, 15(3), 363-381.
Heredia, K. M. M., & Molina, J. E. S. (2018). Límites y alcances del bilingüismo en el contexto del Plan Nacional de Desarrollo en Colombia 2014-2018. Revista de Ciencias de la Educación, Docencia, Investigación y Tecnologías de la Información., 3(2), 26-26.
Nota: El contenido de este artículo, es opinión y conceptos libres, espontáneos y de completa responsabilidad del Autor. Profesor de tiempo completo titular, investigador 1279 (80), Doctor en ciencias Humanas, Par académico MiniCiencias-MEN