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Por: GASPAR HERNÁNDEZ CAAMAÑO.
“Que se lea, discuta y critique su contenido”. Laura Ardila. ______.
Colombia y, en particular, Barranquilla carecen, en el ámbito cultural, de una tradición de crítica, en el campo de la literatura o del periodismo. Son escasos los ejemplos de ensayos críticos sobre obras o autores. Lo que no impide afirmar que han existido brotes aislados de crítica, tanto en Universidades o en medios periodísticos, como cuando éstos tenían suplementos en sus ediciones dominicales.
Ante esta ausencia es natural que no existan, en los actuales momentos de la vida intelectual en Barranquilla, algunos personajes, en la academia o en el periodismo, a los cuales podamos identificar como críticos, profesionales en el análisis de la producción de obras artísticas, ya sea en las bellas artes. Casi todo el que “critica” prefiere llamarse comentarista u opinador. Y “lavarse las manos” contestando: “esa es mi sagrada opinión. y punto!”.
Ante este triste panorama cultural, ya que desde la universidad no brota ningún espíritu crítico, más allá de “los encapuchados”, atreverse a críticar es correr el riesgo de la estigmatización o el ostracismo. Corriendo tal riesgo me atrevo a presentar mi lectura del libro que “censuró” una editorial española, titulado: “la costa nostra”, que acaba de publicar Rey Naranjo Editores, autoría de la periodista Laura Ardila Arrieta.
Entonces, luego de concluir la lectura con un resaltador rojo, solo me quedó la sensación que el polémico libro, por aquello del “intento de censura”, es un “refrito”. Es decir, la autora “sistematizó”, para darle forma de libro, diversos informes periodísticos que había redactado y publicado en el medio digital la silla VACIA durante el tiempo en que laboró para el mismo, dirigiendo la silla caribe.
Un refrito es, en el argot culinario, “un calentao“, sobrante de comida que se guarda para otra ocasión. En ese orden, la autora resolvió revivir sus apuntes de reportera en la silla caribe y, con habilidad, transformarlo en un libro de ocasión, pues cómo se explica el siguiente mensaje: “este libro viaja a imprenta el 1 de agosto de 2023. cuatro días atrás álex char inscribió su candidatura a la alcaldía de barranquilla por tercera vez. su intención de voto es cercana al 80%”. Es decir, su presunto objetivo es “torpedear” a un candidato de una contienda electoral. Terminado ésta cual es el futuro del libro?
Reitero que además de un refrito (el 10% de los pies de páginas son de la silla, los otros corresponden a El Heraldo, Semana y otros medios), el libro se produce, con polémica de “censura” y todo, para pretender detener otra aspiración electoral. un libro para influir en contra de una anunciada campaña política. Ambas circunstancias lo convierten, ante mí talante de lector, en una “obra menor” del periodismo nacional, aunque se promocione como: “una joya periodística”, “libro memorable”(…)”de una gran cronista”(ver prólogo).
Ahora, en mi lectura detecte unas imprecisiones históricas que merecen ser anotadas porque “no temen a la verdad”. Así que procedo a señalarlas y a precisarlas, pues fui testigo en tales situaciones.
Primera. Los cimientos. En el párrafo 5o. de la página 54 leí:
“Desde su silla de gobernador designado, Char (…), le apostó a mantener cierta autonomía y a lograr gestión en el Atlántico. aquellos fueron los cimientos del movimiento político propio bajo la sombrilla del liberalismo, por lo cual más tarde se presentó al Senado y les ganó el poder local a los viejos caciques“.
La llegada del ex gobernador (el padre) a la contienda electoral fue gestada, un mediodía de sábado, en reunión celebrada en la oficina del ex senador Emilio Lebolo Castellanos, a la que acudió su padre, el ex senador Emilio Lebolo de la Espriella (un viejo cacique) con la obvia presencia del Sr. Char. El viejo Lebolo, con papel en mano, le preguntó: “Fuad cuantos empleados tienen las Olímpicas y cuantos proveedores”. Conocidos los números, los multiplicaron por 10. Y con esa fórmula contable, el invitado de los Lebolos, padre e hijo, se convenció y decidió irse en campaña.
Se tomó una foto que registro la reunión. Redacté una nota de pie a la foto bajo el título:”Char a la política“. Las lleve hasta Diario del Caribe y el difunto Miguel Lozano el público en primera página en la edición dominical. la evidencia pueden buscarla en los archivos del extinguido diario.
Segunda. “La transformación de Barranquilla“, con ese título, desde la página 117, se cuenta lo siguiente:
“La primera Administración de Alejandro Char arrancó con el compromiso, que sobre todo era una urgencia, de “ordenar la casa” en materia de plata.(…).
“Barranquilla acumulaba deudas (…). Y la cuestionada concesión de Métodos y Sistemas que, hacia el recaudo de los impuestos, sólo había girado dos mil millones de pesos por concepto del recaudo del Predial en los últimos meses de 2007. fue en ese momento en que el mandatario decidió armar un equipo para tumbarla“(ver pág 118).
Esta afirmación no es cierta. Quién inició las acciones legales para “tumbar” dicha concesión fue el Exalcalde Humberto de Jesús Caiaafa Rivas. Fui asesor del Despacho, apoderado del Distrito y defensor técnico del ex-alcalde. Luego de un detenido estudió presenté una demanda administrativa, mediante la Acción Contractual de nulidad por objeto ilícito ante lo Contencioso Administrativo del Atlántico, que años después así lo declaró; y denuncia de carácter penal contra los representantes legales de los contratistas los ángeles y métodos y sistemas, está acción afectó la credencial del excongresista David Char Navas, quien fue contratista, por parte de la Sala de Casación Penal de la Corte Suprema de Justicia.
Las evidencias de ambos procesos se pueden conseguir en los archivos de los juzgados y Tribunales de Barranquilla. esa es la verdad histórica, amén de judicial. Y deberían estar incluidas en un trabajo imparcial sobre eventos públicos.
Así las cosas, dejo expuesta mi “critica” al tan promocionado libro, desde los clanes del frio. Que no deja de ser una muestra más del periodismo de tendencia que a diario se “enseñorea” en Redes y Medios de un país dividido, no solo por la geografía, el clima y la política, sino por la raza. A unos los atacan por “turcos perros” y a otros por negros. Cuando vamos a ser una república unitaria?. he dicho!.
La próxima: Eventos académicos desde nuestro caribe.
Nota: El contenido de este artículo, es opinión y conceptos libres, espontáneos y de completa responsabilidad del Autor.