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Por: Jairo Eduardo Soto Molina

“Los entrenadores podemos cometer dos pecados: hacer caminar a jugadores que vuelan o pretender que vuelen los que sólo pueden caminar” Marcelo Bielsa

Marcelo Bielsa, en una rueda de prensa, ofreció una perspectiva contundente sobre el declive del fútbol sudamericano en comparación con el pasado. En el imperdible análisis de Bielsa éste recordó el São Paulo de 1992, formado por jugadores de la Selección Brasileña que aún jugaban en el fútbol local antes de emigrar a Europa. Entre ellos estaban figuras como Raí, Antonio Carlos, Ronaldo y Cafú, quienes participaron en dos finales de Copa Libertadores antes de convertirse en jugadores “europeos”.

Bielsa subrayó cómo el fútbol ha pasado de ser un deporte popular, accesible para las clases más pobres, a convertirse en un mercantilismo y deporte de élite. En el pasado, el fútbol ofrecía una fuente de felicidad gratuita, un escape accesible para los más desfavorecidos. Sin embargo, hoy en día, jóvenes talentos como Endrick y Estêvão se van a Europa a temprana edad, privando a las ligas locales y a los aficionados de esa alegría compartida.

El entrenador argentino lamentó que el fútbol, una de las pocas alegrías accesibles para las clases populares, se esté alejando cada vez más de su esencia comunitaria debido a la comercialización y los derechos de transmisión. Esta transformación convierte al fútbol en un lujo, relegando a las clases populares a un segundo plano en un entretenimiento que antes disfrutaban sin barreras económicas.

La crítica de Marcelo Bielsa resalta una transformación profunda y preocupante en el fútbol contemporáneo. En el pasado, el fútbol servía como un punto de unión y felicidad para las comunidades más pobres, ofreciendo entretenimiento y alegría sin costo alguno. Esta accesibilidad permitía a todos disfrutar del deporte, independientemente de su situación económica.

Sin embargo, en la actualidad, el fútbol se ha convertido en un negocio globalizado donde los jóvenes talentos sudamericanos son transferidos a equipos europeos a una edad muy temprana. Este fenómeno no solo despoja a las ligas locales de sus mejores jugadores, debilitando el nivel competitivo, sino que también priva a los aficionados locales de la oportunidad de ver a sus ídolos crecer y triunfar en sus propios clubes.

La partida prematura de jugadores como Endrick y Estêvão refleja una tendencia más amplia de mercantilización del deporte, donde el dinero y las oportunidades económicas prevalecen sobre las raíces culturales y la conexión emocional que el fútbol ofrecía a las masas. Esta crítica de Bielsa nos invita a reflexionar sobre el impacto social del fútbol y cómo la comercialización del deporte puede alienar a los seguidores más apasionados y necesitados de esa alegría compartida que el fútbol solía brindar.

El fenómeno descrito sobre la transferencia de jóvenes talentos colombianos como Yaser Asprilla al Watford y Jhon Jáder Durán al Aston Villa refleja la realidad del mercado global del fútbol. Varios factores contribuyen a esta dinámica:

  1. Mercado Global del Fútbol: El mercado de transferencias de fútbol funciona de manera similar a una bolsa de valores, donde los jugadores son cotizados y valorados diariamente según su rendimiento y potencial. Esta valoración dinámica los hace atractivos para los clubes europeos, que tienen recursos financieros mucho mayores comparados con los clubes sudamericanos.
  2. Desigualdad Económica: Los clubes europeos, respaldados por economías más fuertes y monedas más estables como el dólar y el euro, pueden ofrecer sumas significativas por jóvenes talentos. La moneda colombiana, siendo una de las más devaluadas, no puede competir en este aspecto, obligando a los clubes locales a vender sus estrellas para obtener recursos financieros vitales.
  3. Oportunidades para Jugadores: Para los jugadores, trasladarse a Europa no solo representa un incremento salarial sustancial sino también una oportunidad para desarrollarse en ligas más competitivas y visibles, lo cual puede mejorar sus carreras y su valor de mercado a largo plazo.
  4. Impacto en Ligas Locales: Esta migración de talentos debilita a las ligas locales, privando a los aficionados de disfrutar del talento local y afectando el nivel competitivo de los campeonatos nacionales. A largo plazo, esto puede disminuir el interés y la inversión en el fútbol local, creando un ciclo que perpetúa la dependencia de la venta de jugadores jóvenes.
  5. Este fenómeno ilustra cómo la globalización y las desigualdades económicas afectan el desarrollo y la sostenibilidad de los clubes de fútbol en países con economías menos robustas.

La necesidad de una legislación en el deporte en los países suramericanos para garantizar que los futbolistas permanezcan al menos 3 años en el deporte local es un tema crucial para el desarrollo del fútbol en la región. Aquí se exponen algunas razones clave para esta necesidad:

  1. Desarrollo de talentos locales: La permanencia de los futbolistas en las ligas locales permite un mayor desarrollo de talento. Los jugadores jóvenes tienen la oportunidad de madurar y mejorar sus habilidades en un entorno competitivo antes de dar el salto a ligas extranjeras más exigentes.
  2. Fortalecimiento de las ligas locales: Mantener a los talentos emergentes en las ligas locales aumenta el nivel competitivo y atractivo del fútbol nacional. Esto no solo mejora la calidad del juego, sino que también atrae más aficionados, patrocinadores y medios de comunicación, generando mayores ingresos para los clubes y la liga en general.
  3. Identidad y arraigo: Los jugadores que permanecen más tiempo en sus clubes locales desarrollan un sentido de pertenencia y lealtad hacia su equipo y comunidad. Esto fomenta una identidad futbolística más sólida y una conexión emocional con los aficionados, lo cual es esencial para el crecimiento del deporte a nivel nacional.
  4. Sostenibilidad económica: Los clubes suramericanos frecuentemente venden a sus mejores jugadores a temprana edad debido a necesidades financieras. Una legislación que garantice la permanencia mínima permitiría a los clubes negociar mejores contratos y transferencias en el futuro, asegurando una mayor estabilidad económica a largo plazo.
  5. Desigualdad económica: Las economías de los países suramericanos no pueden competir con las de Europa y otras regiones en términos de salarios y recursos financieros. La legislación ayudaría a equilibrar esta disparidad, permitiendo que los jugadores se desarrollen en casa antes de buscar oportunidades en el extranjero.

Implementar una legislación que asegure la permanencia mínima de tres años para los futbolistas en sus ligas locales puede tener un impacto positivo significativo en el desarrollo del fútbol suramericano, tanto en términos de calidad del juego como en la sostenibilidad económica y social de los clubes y las comunidades involucradas.

Citas al cierre:

“Éxito y felicidad no funcionan como sinónimos, hay gente exitosa que no es feliz, y hay gente que no necesita del éxito para serlo. La obligación que tiene todo ser humano es rentabilizar sus opciones para ser feliz” Marcelo Bielsa.

“Ser el mejor te quita felicidad, horas con tu mujer, con tus amigos, te quita fiestas, diversión. Ustedes tienen un problema muy grande. Muy, muy grande. Tienen dinero, pero no tienen tiempo para disfrutar del dinero que tienen. Lo que el dinero te da en términos de felicidad. Eso yo ya lo sé porque lo he visto infinidad de veces”. Marcel Bielsa

Tomemos un tinto, seamos amigos: Café Águila Roja, Sigan siendo felices Jairo les dice

Nota: el contenido de este artículo, es opinión y conceptos libres, espontáneos y de completa responsabilidad del Autor. Jairo Eduardo Soto Molina, Profesor de tiempo completo titular, investigador 1279 (80), Doctor en ciencias humanas, Par académico MiniCiencias-MEN