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- ¿Qué será de nuestros niños y jóvenes?
- ¿Será que nuestros niños y jóvenes están siendo vulnerados por la delincuencia y la violencia?
- ¿Será que nuestros niños y jóvenes son victimarios?
La Constitución Política de Colombia, es una de las más completas y avanzada del mundo, está es muy clara en lo que se refiere a la niñez y a la adolescencia.
Artículo 44. “Son derechos fundamentales de los niños: la vida, la integridad física, la salud y la seguridad social, la alimentación equilibrada, su nombre y nacionalidad, tener una familia y no ser separados de ella, el cuidado y amor, la educación y la cultura, la recreación y la libre expresión de su opinión. Serán protegidos contra toda forma de abandono, violencia física o moral, secuestro, venta, abuso sexual, explotación laboral o económica y trabajos riesgosos. Gozarán también de los demás derechos consagrados en la Constitución, en las leyes y en los tratados internacionales ratificados por Colombia. La familia, la sociedad y el Estado tienen la obligación de asistir y proteger al niño para garantizar su desarrollo armónico e integral y el ejercicio pleno de sus derechos. Cualquier persona puede exigir de la autoridad competente su cumplimiento y la sanción de los infractores. Los derechos de los niños prevalecen sobre los derechos de los demás”. Artículo 45. “El adolescente tiene derecho a la protección y a la formación integral. El Estado y la sociedad garantizan la participación activa de los jóvenes en los organismos públicos y privados que tengan a cargo la protección, educación y progreso de la juventud”.
De igual manera, citamos el contexto jurídico nacional, enmarcado en la LEY 1098 DE 2006 (NOVIEMBRE 8) “Por la cual se expide el Código de la Infancia y la Adolescencia. El Congreso de Colombia, DECRETA: LIBRO I La protección integral TÍTULO 1 DISPOSICIONES GENERALES CAPÍTULO I PRINCIPIOS Y DEFINICIONES. Artículo 1º. Finalidad. Este Código tiene por finalidad garantizar a los niños, a las niñas y a los adolescentes su pleno y armonioso desarrollo para que crezcan en el seno de la familia y de la comunidad, en un ambiente de felicidad, amor y comprensión. Prevalecerá el reconocimiento a la igualdad y la dignidad humana, sin discriminación alguna. Artículo 2º. Objeto. El presente Código tiene por objeto establecer normas sustantivas y procesales para la protección integral de los niños, las niñas y los adolescentes, garantizar el ejercicio de sus derechos y libertades consagrados en los instrumentos internacionales de derechos humanos, en la Constitución Política y en las leyes, así como su restablecimiento. Dicha garantía y protección será obligación de la familia, la sociedad y el Estado”.
Por otra parte, en el marco internacional, los derechos del niño comienzan a ser tema de debate internacional desde principios del siglo XX y se concreta, en la primera declaración de los derechos del niño en 1924. En esta primera declaración se resalta que “la humanidad debe a los niños lo mejor de sí misma”. A través, de esta expresión las naciones expresan la necesidad de reconocer a los niños y a las niñas y dar especial protección a sus derechos.
Con esta primera medida jurídica, la Liga de Naciones aprobó la Declaración de los Derechos del Niño. Luego en 1945, la Carta de las Naciones Unidas exhortó a las naciones a promover y adelantar el respeto de los derechos humanos y las libertades fundamentales “para todos”.
La Declaración Universal de los Derechos Humanos, aprobada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1948, reconoce y protege los derechos de los niños y de las niñas al establecerse que todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos. Este es un reconocimiento implícito en los derechos del niño a la protección integral, en el que se establece que la maternidad y la infancia tienen derecho a cuidado y asistencia especial y aborda a la familia como elemento natural y fundamental de la sociedad.
Por tal motivo, los conceptos de niño y adolescente han sido objeto de estudiosos de diferentes ciencias que han revisado el proceso de evolución del ser humano y las etapas del ciclo vital, que marcan características específicas en cada una de ellas, ya sea por aspectos genéticos, de herencia, biológicos, psicológicos y socioeconómicos que inciden en el crecimiento y desarrollo.
Se entiende por primera infancia los comprendidos entre 0 – 5 años; infancia entre; 6 – 10: preadolescentes de 11- 12 años; adolescentes entre 13 – 17 años y juventud los comprendidos entre 18 y 28 años.
La literatura y el discurso son muy bonitos, ¿pero será que se cumple con todo lo citado?
Los tipos de violencia en la cual se ven inmersos los niños y jóvenes son: Sexual, física, psicológica, emocional y económica, las cuales llevan a que el joven se convierta de igual forma en victimario.
Las desigualdades sociales, las guerras, las situaciones geopolíticas, la falta de oportunidades, las faltas de garantías para entregar una buena crianza, las familias disfuncionales, los entornos sociales inadecuados, la no correcta utilización del tiempo libre, dan como resultado grupos de niños y jóvenes involucrados en actividades delictivas como: La distribución, comercialización e ingesta de drogas alucinógenas, el sicariato, el hurto, la extorción, entre otras.
Para muchos docentes, psicólogos sociales y trabajadoras sociales, la situación es bastante fuerte, y coinciden que se deben tener políticas públicas efectivas que logren mitigar los riesgos a los cuales se ven enfrentados los niños y jóvenes, en todo el mundo.
En la ciudad de Barranquilla al Centro de servicios para adolescentes CESPA, llegan un promedio de 16 casos semanales, de menores de edad involucrados y con la presunción de inocencia en actos donde aparentemente son victimarios de algún delito.
La percepción que tienen algunos residentes en la ciudad de Barranquilla y su área metropolitana es de preocupación, basadas en entrevistas a ciudadanos, sobre todo en Soledad y Malambo, y la estigmatización que tienen históricamente algunos barrios de las localidades suroccidente, suroriente y metropolitana; de igual manera en municipios como: Sabanalarga, Baranoa, Repelón, Luruaco y Manatí, presentan aumento en la percepción negativa a nivel delictivo.
Por otra parte, el pasado mes de mayo, la ciudad de Barranquilla, fue sorprendida por la desafortunada noticia, del macabro asesinato de una niña de seis años en el barrio Sourdis, caso en el cual esta presuntamente implicado un menor de edad con un vasto historial.
Telatiroplena.com, consulto a la Teniente de la Policía Nacional Yeimmy Vargas, jefe del grupo de Infancia y Adolescencia en el Área Metropolitana de Barranquilla y nos contó la problemática de los niños y jóvenes vulnerables por la delincuencia.
Según estadística presentada por la Policía de Infancia y adolescencia de la Metropolitana de Barranquilla, durante el 2018 se presentaron 240 casos de menores infringiendo la ley penal; y lo que va corriendo del año 2019 a corte 12 de junio, se han presentado 329 casos, presentando un aumento del 37%. Entre tanto, el número de denuncias de menores víctimas del delito, en el 2018, se presentaron 620 casos; y lo que va del 2019 a corte 12 de junio, se han presentado 714 casos.
De igual manera, telatiroplena.com, consultó a la médico psiquiatra Laura Páez Brochero, quien habló de los comportamientos y conductas de los jóvenes victimarios y que se encuentra inmerso en el delito.