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  • Alex Meza Lambraño, cambio las pistolas, la guerra y el hampa por la Biblia y una vida con propósito.
  • Alex Meza Lambraño, ex integrante de la reconocida banda de los Meza, nació en un hogar donde desde muy pequeño vio: alcohol, droga y armas.

Su padre Roberto Meza, era el jibaro de la chinita, y en su casa no solo se vendía droga, también se consumía, para Alex el ejemplo que recibió no fue el mejor, su papá era una fiera y un astuto expendedor de drogas. En su hogar conformado por 4 hermanas y 3 hermanos, todos trabajaban en torno al expendio de alucinógenos.

Alex Meza, contó a telatiroplena.com, que cuando su padre murió, a cargo del negocio familiar, quedo su madre siendo la jibara de la chinita y cada hermano se comprometía en hacer creer el negocio.

“yo a los 13 años ya era pandillero, drogadicto y mi madre me regalo mi primer revolver para que no me mataran” afirma Meza.

En los años 96, 97 y 98, conformaron la banda de limpieza, que dominaría parte del sur oriente de Barranquilla y su área metropolitana, vivieron la opulencia del poder, carros, motos, droga, mujeres y  una guerra total, la cual dejo como resultado a sus hermanos muertos, y  a Alex detenido por la Policía Nacional en un gran operativo el 3 de mayo del año 2000; pago una condena y después de 6 meses de estar en la cárcel, recibió el mensaje por parte de Rodrigo Arenas, que existía un Dios que cambia corazones y mentes. En la propia cárcel recibió a una mensajera, Patricia Payares. “Patricia es una mujer que nació en los caminos del señor, y Dios me la envió para que se convirtiera en mi esposa, con la que tengo tres hermosos hijos” informó Alex Meza.

Este hombre que era el terror de muchos, a sus 25 años de edad llego a la cárcel, y para él fue lo mejor que le pudo haber pasado, ya que en prisión conoció una nueva vida. Hoy está sometido al señor Jesucristo y se la pasa todos los días llevando el mensaje a muchos jóvenes que se encuentran sufriendo en el tenebroso mundo de la delincuencia.

“La casa ubicada en la calle 12ª # 10b – 20, habitó el pecado y la perversidad; será una casa donde habitará el Espíritu Santo” confirma Meza Lambraño, quien pastorea una pequeña iglesia.

Según Alex Meza, hoy se siente satisfecho y feliz de su cambio y transformación de vida. Nos contó que desea ayudar a la juventud, a los niños y a todos los que de una u otra forma están en la vulnerabilidad. De igual manera asegura, que en estos tiempos el mundo delictivo es muy fuerte, hay muchos grupos, pero no es difícil cambiar los corazones y las mentes de esta gente, “si yo pude cambiar, cualquiera lo puede hacer”.

Alex Meza Lambraño, es una NOTA POSITIVA en telatiroplena.com

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