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Por: Jenniffer Rueda Martínez

Esto es ciencia, neurológicamente hablando y gracias a la plasticidad cerebral, todas las etapas de la vida son importantes, pero los 5 primeros años son definitivos y contundentes, porque en este tiempo el cerebro graba más que el resto de la vida, aquí se define, entre muchas otras cosas, la forma en que vamos construyendo estructuras tan importantes como vínculos y relaciones que establecemos con nosotros y con los demás, si piensas tener hijos o estas en esta etapa con el tuyo, o si eres docente, o tienes contacto cercano con un pequeño, ten mucho cuidado con las palabras y frases que les dices y les repites, esas que a veces pensamos que son inofensivas porque todos las dicen, si, esas de las que todos se ríen.

Colócate en el lugar de ese bebe y piensa que te hubiera gustado que te dijeran tus padres en ese momento, de lo que digas y hagas, dependerá la programación que lo va acompañar toda la vida, tu defines si serán memorias dignas de recordar o marcas dolorosas convertidas en traumas. Ahórrale plata y años de terapia.

¿Sabes qué todo lo que pensamos, sentimos, hablamos y hacemos, es decir todo lo que somos, se debe en gran parte, a la forma en la que fuimos programados desde pequeños por las personas y experiencias que conformaron nuestra crianza?, pero no te lo digo para que culpes a tus padres, porque resulta que ellos también fueron programados para ser como son, no es su culpa, ni tuya, ni de nadie, nadie nos enseñó a  amar, mucho menos a amarnos, pero a tus padres nadie se los dijo, a ti y a mí tampoco nos lo dijeron, pero ahora yo si te lo estoy diciendo a ti y el saber es un gran poder y poseer un poder conlleva una gran responsabilidad y cuando sabemos las cosas y las seguimos haciendo somos ignorantes conscientes, eso es como cuando dicen que el que peca sabiendo lo que hace, peca dos veces.

Lee muy bien lo que aquí esta escrito, que esto no lo saque de una galleta de la fortuna, cuidado con los “es igualito a su papá”, o a cualquier familiar, los apodos, lo que se dice en los momentos de enojo y frustración, “eres mala, no debiste haber nacido, eres una carga para mí, no sirves, bruto”, cuidado si dejamos marcas dolorosas o huellas memorables, ahórrale los traumas y la plata de la terapia a tus hijos, absolutamente todos tenemos traumas, entonces sanate para ser fuente de amor.

Nota: El contenido de este artículo, es opinión y conceptos libres, espontáneos y de completa responsabilidad del Autor. Psicóloga, Jenniffer Rueda Martínez